“Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” Marcos 16:15

La evangelización nos revela el gran amor de Dios por la humanidad, Dios que busca restaurar al hombre caído, dándole una nueva perspectiva de vida a través del anuncio de las buenas nuevas. La revelación del amor de Dios es para todas las personas, para que puedan acercarse a Él, para la alabanza y gloria de Su nombre. Y para esta misión, llamó a hombres y mujeres dispuestos a escucharlo y servirlo como mensajeros a las naciones, dondequiera que haya una oportunidad para servirle en el anuncio de sumar la mayor cantidad de personas al rebaño del Señor, Jesús.

No podemos limitarnos, ya que el evangelio no está limitado a grupos o posiciones políticas, el evangelio satisface necesidades en general, transformando vidas dondequiera que sea anunciado. Jesús fue y seguirá siendo el mejor ejemplo en la historia de la humanidad, para que podamos seguir Su ejemplo, para que dondequiera que vayamos, se alcancen vidas, se restauren personas, todo para la alabanza, honra y gloria de Su nombre.

Así que tú, que estás leyendo este mensaje, no te quedes fuera, ven y únete a nosotros para salvar las almas de esta generación y de la generación futura.